El Mercado de los Artesanos se fue gestando en el imaginario de un grupo de artesanos, hombres y mujeres de todas las edades, que en noviembre de 1982 celebraron la primera asamblea bajo techo que abrigaba esperanzas de trabajo y libertad, y un futuro que ni el más entusiasta de los soñadores hubiese logrado predecir.
La idea de una feria propia fue el objetivo primario que integro las voluntades y la fuerza imprescindible para lograr con mucho trabajo y esfuerzo, en diciembre del mismo año la apertura al público de un local de exposición y venta de artesanías en Plaza Cagancha 1365, acompañados en una verdadera fiesta por otros actores de la cultura, como música, danza, teatro y títeres.